Cierto día, cuando el sol radiante,
salía en una mañana de frescura impregnante,
una Zorra muy mañosa y astuta,
quien presurosa seguía sus ruta,
de pronto se encuentra con una Tortuga
y en una conversación centrífuga,
- Tortuga ¿Por qué te tropiezas en mi camino?
ya que por sus semblante parecía perdida,
respondióle, - ¿Señora Zorra, conoce camino alguno ,
que guíe mi andar sin rumbo?
--- Inocente criatura si quieres puedes venir por mi camino,
siguió las huellas de
buscó la manera de ocultarse;
mientras la tortuga muy confundida
no encontrando mas huellas se sintió perdida.
Pero de pronto diviso a lo lejos una gran cima
y pensando que llegaría aunque con mucha calma,
empezó a caminar y caminar
Y siguió así sin parar,
en el bosque quiso buscar.
Pero por el mal que a
entre más fieras que ella fue a parar.
No tienes que ser excelente
para empezar, Pero tienes que
empezar para ser excelente.
Estudiante: Claudia E. Canelas Aponte
Especialidad: Lenguaje y Comunicación
Semestre: Quinto
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